martes, 2 de junio de 2015

Tema 17 La Personalidad

La estructura de la personalidad en el psicoanálisis

Freud elaboró dos teorías de la personalidad. La primera es la época del inconsciente complementado por el consciente y el preconsciente.

En 1923, perfeccionó esta teoría con un nuevo modelo formado por tres elementos: El ello, el yo y el superyó.
El ello es la parte más antigua de nuestra personalidad y la fuente de toda la energía mental. Es totalmente inconsciente y primitiva. Consiste en la satisfacción inmediata de las necesidades, el ello es totalmente instintivo.
El ello no tiene valores morales ni actúa pensando en los demás, actúa solo conforme al principio del placer.
El yo se origina a partir del ello en el niño pequeño.El yo tiene como finalidad el contacto con la realidad y la autoconservación en esa realidad exterior.
Cuando actúa,el yo ha de considerar las consecuencias de sus actos más allá del placer o la satisfacción que pueda obtener. Este criterio se denomina principio de realidad, y se opone al principio del placer propio del ello.
El yo controla el lenguaje y el pensamiento, los movimientos psíquicos y las tensiones internas de las personas.
El superyó constituye en torno a los 5-6 años, cuando los niños aprenden el sentido de las normas que hay que respetar. El superyó ya desarrollado representa las pautas morales, es el punto de referencia moral de la persona.

Relaciones entre el yo, el ello y el superyó

Como dice el propio Freud, el yo debe servir a dos amos: el ello y el superyó. Si están de acuerdo,no hay problema, pero cuando el ello - movido por el instinto y el principio del placer- quiere algo que el yo - la realidad- y el superyó -la moral- no pueden aceptar,se origina una tensión y un conflicto internos. El yo ha de mantener el equilibrio y eliminar las tensiones.
Por regla general, el yo y el superyó son aliados frente al ello.

Los mecanismos de defensa

Freud dice que el yo, tan presionado por el ello y el superyó, dispone de unas técnicas para evitar estas presiones: los mecanismos de defensa, que son:

  • Represión: Es el más corriente. El superyó frena los impulsos del ello. Así ayuda al yo, pero al mismo tiempo le crea conflictos. El conflicto que nace de un deseo que no se puede satisfacer.
  • Racionalización: Consiste en inventarse argumentos racionales para justificar una conducta que exige el ello.
  • Negación de la realidad: Consiste en negar un hecho real o en deformar la realidad. Es la conducta típica del que dice enseguida "yo no lo he hecho".
  • Proyección: Consiste en ver en los otros sentimientos o ideas propios que uno no quiere aceptar.
  • Regresión: Ante una dificultad tienen comportamientos propios de épocas anteriores de la vida o inapropiadas de su edad.
  • Reacción: Consiste en manifestar una conducta externa contraria a un sentimiento que se ha reprimido. La formación reactiva.
  • Sublimación: Consiste en desviar el objetivo de las pulsiones hacia finalidades socialmente aceptadas, y toleradas por el superyó. Ofrece una salida constructiva y eficaz a las pulsiones.
  • Desplazamiento: Se translada un sentimiento, a otro objeto o persona.
Teoría de la personalidad según la psicología humanista
La naturaleza de cada persona no parece ser esencialmente mala. Cree que las necesidades básicas son todas neutrales o positivas.
Maslow cree que las personas tienen como tendencia básica, la búsqueda de la autorrealización. Estos son sus rasgos:
  1. Está satisfecha.
  2. Se acepta a sí misma.
  3. Tiene una percepción clara y eficiente de la realidad.
  4. Se muestra abierta a las experiencias.
  5. Es espontánea y expresiva.
  6. Tiene una gran capacidad para resolver todo tipo de problemas.
  7. Ama la soledad.
  8. Es autónoma e independiente.
  9. Tiene una capacidad permanente para gozar de la vida.
  10. Sus relaciones interpersonales son buenas.
  11. Posee una gran riqueza de reacción emocional.
  12. Tiene un talante democrático.
  13. Tiene sentido del humor.
  14. Es creativa y original.
  15. Tiene una gran capacidad amorosa.
  16. Acepta cambios en la escala de valores social.
  17. Goza con mayor frecuencia de experiencias cumbre.
  18. Está más identificada con los problemas de los demás.
La autorrealización se prolonga a lo largo de toda la vida. Maslow afirma que, tras la autorrealización, se ocultan los siguientes valores: perfección,totalidad,verdad,modestia,justicia...
Uno de los rasgos que definen a la persona autorrealizada es que disfruta con mayor frecuencia de experiencias cumbre.
Las experiencias cumbre son hechos concretos, situaciones vividas por las personas, que marcan la manera de ser y de comprender el mundo.
Las características que definen una experiencia cumbre son:
  • Es una experiencia global. El sujeto pierde una posible perspectiva utilitaria para captar la realidad como una totalidad.
  • Es una experiencia siempre buena y deseable. Es perfecta, completa y no necesita ninguna otra cosa.
  • Aporta una percepción diferente de la realidad.
  • Comporta una pérdida de las nociones de espacio y tiempo.
  • Supone una superación de muchas contraposiciones y conflictos.
Maslow cree que, desde siempre, muchas personas han vivido experiencias cumbre, pero que los psicólogos nunca les han dado importancia.

La evolución moral de la personalidad según Kohlberg

Kohlberg desarrolla una teoría sobre la evolución de la personalidad en el aspecto moral. Sigue la teoría de Piaget de las etapas. La evolución moral de la personalidad es una evolución social y a la vez una evolución del pensamiento y del razonamiento, se distingue tres niveles:

Nivel preconvencional (0-8/10 años)
El control de la conducta es externo, recibe las presiones desde fuera y se limita a evitar los castigos o a obtener recompensas. Se dan dos estadios:ç

  • Estadio de la moral heterónoma. Se actúa según el premio y el castigo. Conducta egocéntrica y teme el castigo. Hasta los 6 años.
  • Estadio del egoísmo mutuo. Se caracteriza por el hedonismo simple:una conducta es moral si proporciona alguna satisfacción personal. Respeta las normas de juego y sociales. Se aplica la ley del Talión: Ojo por ojo y diente por diente.
Nivel convencional (10-16/20 años)
La conducta moral se define como el comportamiento que contribuye al orden social. Se dan dos estadios:

  • Estadio de las expectativas interpersonales. El factor afectivo humaniza las relaciones. Existe ya una capacidad abstracta, pero las personas se dejan llevar por los valores impuestos por la sociedad.
  • Estadio de la responsabilidad y el compromiso. Se acepta la legitimidad de las leyes y del orden social porque se considera necesario para mantener la estructura social y los intereses colectivos. Marca la transición a la edad adulta.
Nivel postconvencional (desde 18/20 años)
Este nivel implica la autonomía, la compresión de las normas sociales y la capacidad de interpretarlas críticamente. Se tiene conciencia de la diferencia entre las propias normas y los principios universales. Hay dos estadios:

  • Estadio del contrato social. Implica el reconocimiento de que todo el mundo tiene derecho a la libertad, la dignidad, la vida.., es decir, los derechos humanos. Las normas sobre lo correcto y lo incorrecto.
  • Estadio de los principios éticos universales. Presupone la aceptación de la igualdad absoluta de todos los seres humanos. También significa la autonomía moral completa y un compromiso ético y moral absoluto ante cualquier situación. Modelo ideal de la personalidad moral.
La evolución de la personalidad no siempre sigue este ritmo de edades y niveles que propone Kohlberg.